Reporte Nacional de Prosperidad Urbana, CPI, en México 2019.

Reporte Nacional de Prosperidad Urbana en México 2019


El Índice de las Ciudades Prósperas, (CPI) es una metodología de ONU-Habitat que permite tener una radiografía de la complejidad urbana, traduce el bienestar en una métrica medible, y mide la eficiencia de la ciudad y el efecto de las políticas públicas


En México, el CPI se implementa desde 2014, gracias a una alianza de trabajo entre el INFONAVIT y ONU-Habitat, colocando al país, como el más analizado por esta metodología en el mundo. Actualmente se cuenta con:


Información urbana para 467 municipios de México.

Lo que representa 69.4% de la población nacional y 94.5% de la población urbana de México.

305 estudios CPI

305 reportes municipales de prosperidad a partir de la versión básica del CPI.

CPI extendidos y nacionales

• Aglomeración urbana de la CDMX, Guadalajara y Monterrey.
• Municipios de Zapopan, Querétaro y Mérida.
• Reportes nacionales (2015 y 2019).


A partir de toda la información compilada y de su actualización en 2018, ONU-Habitat elaboró, con apoyo de INFONAVIT y la SEDATU, el Reporte Nacional de Prosperidad Urbana en México 2019.

Medida de prosperidad en México: 51.03/100

Los resultados señalan que México alcanza un valor moderadamente débil en la escala de prosperidad y que implica la necesidad de fortalecer las políticas urbanas desde una perspectiva transversal y coordinada entre los tres órdenes de gobierno.

Las ciudades mexicanas observan altos valores de prosperidad en variables específicas como:


Espacio habitable (100/100)
Tasa de alfabetización (92.3/100)
Eficiencia del gasto local (86.9/100)
Inscripción equitativa en educación de nivel secundario (86.7/100)
entre otros...

Por el contrario, indicadores débiles corresponden con:


La proporción de generación de energía renovable (2.7/100)
Longitud del transporte masivo (4.1/100)
Recaudación de ingresos propios (12.1/100)
Deuda subnacional (14.4/100)
Expansión urbana (17.1/100)

En México persisten significativas desigualdades en las condiciones de prosperidad

Producto de la poca integración funcional del sistema urbano nacional.

Por los escasos vínculos con el resto del territorio (rural y de alto valor ambiental).

Asi como por la expansión urbana dispersa y de baja densidad que conspira contra la prosperidad de las ciudades.

La ausencia de una política nacional urbana, transversal a diversos sectores de desarrollo y concurrente entre los tres órdenes de gobierno, se ha traducido en un • déficit significativo de infraestructura, • servicios y equipamientos urbanos, • vivienda adecuada insuficiente, • sistemas de transporte público no integrados, • ineficiente uso y consumo de energía y recursos, • segregación socioespacial y otros obstáculos significativos para la prosperidad.


Con base en los resultados nacionales del CPI, ONU-Habitat identifica 10 orientaciones estratégicas para impulsar un modelo de urbanización sostenible que favorezca no solo la adecuada gestión de las ciudades sino su equilibrio con zonas rurales y áreas de alto valor ambiental, desde una perspectiva de ordenamiento territorial:

1

Impulsar la gestión urbana desde lo local, pero con base en una política nacional urbana integrada entre todos los órdenes de gobierno.

2

Eliminar el desequilibrio observado entre las seis dimensiones de prosperidad a nivel nacional, y entre las regiones del país.

3

Lograr la adecuada gestión del crecimiento urbano para aprovechar las ventajas de la aglomeración y reducir los costos sociales, económicos y ambientales de la expansión dispersa y en baja densidad.

4

Impulsar la generación y monitoreo de información urbana a escala local para lograr contar con indicadores territorializados que permitan monitorear y evaluar las acciones públicas a escala de las ciudades.

5

Fortalecer los procesos de gobernanza y coordinación intermunicipal para reducir las brechas de desigualdad espacial intraurbana entre municipios centrales y periféricos.

6

Fortalecer los instrumentos de planificación urbana a escala de las aglomeraciones y no solo municipio a municipio.

7

Consolidar el sistema nacional de ciudades, desde una perspectiva regional con visión nacional sobre la prosperidad y el desarrollo.

8

Implementar una estrategia nacional de gestión medioambiental para reducir la excesiva demanda de recursos provocada por el actual modelo de crecimiento urbano.

9

Generar mejores condiciones de infraestructura de conectividad, a partir de una estrategia integral de desarrollo territorial en las regiones menos prósperas del país.

10

Implementar la medición recurrente del CPI a nivel nacional para monitorear el avance de las agendas globales y monitorear los progresos realizados por las ciudades respecto a la consecución de los ODS en su dimensión urbana.


La implementación de estas orientaciones requiere un nuevo paradigma de gobernanza urbana y la coordinación interinstitucional para enfrentar los desafíos urbanos identificados, promover la acción pública y así liberar el potencial de las ciudades del país para generar un modelo inclusivo, seguro, resiliente y sostenible de urbanización y desarrollo territorial, en consonancia con el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2019-2024.